Creo que las personas con DF son capaces, en muchos casos, de pensar por ellos mismos. Nosotras estamos para ayudarles en lo que podemos y en lo que nos piden dentro del límite de la moralidad y la legalidad. Si ellos saben que comer huevos fritos les sube el colesterol y aún así lo comen, no podemos reprocharles ni encararlo porque es una decisión que una persona cuerda ha tomado para su propia vida.
Como dices, es importante respetar la autodeterminación de la persona.